Piso de 114 m² ubicado en la emblemática Plaza de la Marina Española, Barrio de Palacio, que combina la elegancia y encanto del Madrid de los Austrias con todas las comodidades de una vivienda moderna, gracias a su reciente reforma integral.
El piso cuenta con 2 dormitorios, 2 baños (uno de ellos en suite) y un amplio salón, que destaca por su luminosidad, gracias a sus 2 balcones clásicos con estructuras acristaladas, que ofrecen unas vistas espectaculares de la plaza.
Dispone de ascensor, calefacción individual y aire acondicionado por conductos, proporcionando el máximo confort durante todo el año. Además, incluye plaza de parking (opcional).
El Barrio de Palacio se distingue por su rica herencia cultural, cultura y sofisticación. A pocos pasos de monumentos emblemáticos como el Palacio Real (a 300 metros), el Teatro Real (350 m. ) o la Plaza de España (500 m. ), conectados entre sí por la renovada calle de Bailén, la zona ofrece una amplia oferta cultural, gastronómica y comercial, rodeado de prestigiosos restaurantes, teatros y tiendas. Muy bien comunicado. A menos de 500 metros se encuentran la estación de metro de Ópera (líneas 2, 5 y R), además de varias líneas de autobús como la del 25, 35, 39, 147 y 148.
El barrio de Palacio, ubicado en el distrito Centro de Madrid, es una de las zonas más históricas y monumentales de la ciudad. Su nombre proviene del majestuoso Palacio Real, una de las residencias oficiales de la monarquía española y un referente arquitectónico que domina la zona. Este barrio es un testimonio vivo del pasado de Madrid, con calles que evocan la época de los Austrias y edificios emblemáticos como la Catedral de la Almudena, el Teatro Real y la Plaza de Oriente.
A pesar de su riqueza histórica, Palacio es también un barrio vibrante con una oferta cultural y gastronómica diversa. Lugares como el Mercado de San Miguel, la animada Plaza Mayor y la Cuesta de San Vicente combinan tradición con modernidad. Además, su proximidad a amplias zonas verdes, como los Jardines de Sabatini y el Campo del Moro, lo convierten en un enclave único donde se fusionan el esplendor arquitectónico, la vida madrileña y la tranquilidad de sus espacios abiertos.
